domingo, 12 de agosto de 2012

Nada más.

Que se pare el tiempo, que se detengan todos los relojes porque este es nuestro momento y no durará para siempre. Que se apaguen las luces, que no se muevan las manecillas del reloj de la cocina porque esta noche nosotros controlamos el paso del tiempo. Que se apague la música, que se olviden las deudas, que tú y yo queremos ser dueños del mundo por un momento. Que se nos olvide la ropa, no la necesitamos. Que ya no exista ni un tú ni un yo, que solo exista un nosotros. Y que bailemos a la luz de las velas al ritmo desacompasado de nuestra respiración.
Una caricia por cada momento que alegras con tu presencia. Tus besos me queman, tus ojos se clavan en los míos y me empujas contra ti más y mas fuerte. No hay forma mejor de demostrarme tu amor que haciéndome sentir como lo haces ahora. Te necesito, te necesitaré toda la vida si te marchas. Quédate aquí para siempre.
Que esta habitación se ahogue de pasión, y que poco a poco lleguemos a tocar el cielo juntos.
Morir entre tus brazos, no necesito nada más.

No hay comentarios:

Publicar un comentario